jueves, 15 de abril de 2010

Miedo a conducir, cómo combatir la amaxofobia

La fobia es uno de los más frecuentes trastornos de ansiedad que presenta el ser humano actual. Si tratamos de definirla podemos decir de qué se trata de un temor irracional, exagerado ante determinado objeto que normalmente no produce ese tipo de respuestas.
Cualquier objeto puede transformarse en producto de fobia. Las más frecuentemente observadas son a ciertos animales, como las arañas, ratas, cucarachas, víboras, etc. Estas fobias ahora llamadas específicas, también pueden darse con animales no dañinos como perros o caballos, pichones o partes de los mismos como ser plumas o pelos. Hay fobia a sacarse sangre, a las tormentas, a los espacios cerrados (claustrofobia), a viajar en avión (aerofobia).
Como habitualmente decimos cualquiera de nosotros podría tener una fobia, pero solo en aquellas situaciones donde la fobia se convierte en un factor de deterioro de calidad de vida, es ahí donde empezamos a ver que se convierte en un verdadero trastorno y solamente ahí donde pensamos en que hay que tratarla. Por ejemplo, hay personas que pueden tener fobia a los camellos, pero la verdad es que en Argentina es poco probable que uno se encuentre de una forma sorpresiva con uno de estos animales, los “fóbicos a los camellos” si no van a un ZOO o a un circo es poco probable que se encuentren con un camello. Por esto jamás consultarían, pero imagínese que uno tiene fobia a manejar, seguramente es ahí donde podría plantearse una necesidad de tratamiento.
Dentro de una de las fobias que se esta conociendo en los últimos años encontramos a la fobia a conducir o también llamada amaxofobia. La palabra proviene del latín y se traduce como miedo a los carruajes.
La sociedad no es consciente de la importancia y la extensión de esta fobia. Seguramente, más de lo que la mayor parte de los conductores está dispuesta a reconocer. Porque no es fácil contarle a los demás que se tiene pavor a conducir. Y mucho menos, que lo comprendan. Sudores, temblores, taquicardias, dolor de estómago… son algunos de los síntomas que padecen los afectados. Incluso se dan casos de personas que han tenido que parar el vehículo al sentir una sensación de descontrol.
En la Fundación Fobia Club recibimos varias consultas con este tipo de preocupación, como por ejemplo dice Juan (35 años): “Hace dos semanas que me pongo nervioso solo cuando tengo que manejar mi auto en la ruta, o en la autopista, me pongo a sudar no soy capaz de pasar los 100 Km./h y si tengo que pasar a un auto me palpita el corazón, estoy muy preocupado nunca me ha pasado nada, ha sido de repente, no es que sufrí ningún accidente. Que hago? Esto me esta agobiando necesito manejar el coche para ir a mi trabajo que queda a 25 km. de mi casa.”
Dice Claudia (45 años) “Nunca puedo ir por Panamericana, cada vez que tengo que ir a Unicenter me voy por colectora y me siento que pierdo tiempo. No me animo a ir a ningún lado sola en el auto. Me muero de ganas por ser libre, sacarme este miedo que tengo adentro y poder manejar como lo hace toda persona de mi edad. No quiero vivir arriba de un remise o un colectivo toda mi vida siendo que tengo mi propio auto, se que todo esto es por mi temor irracional”
Qué hacer? Tiene Solución? Hay otros que padecen lo mismo?
Se calcula que un 10 % de la población de USA tiene este problema. La realidad es que como toda fobia especifica tiene un excelente pronóstico. Solo hay que hacer lo conveniente: un buen diagnóstico para después realizar un buen tratamiento
La gente que consulta en general son adultos entre 30 y 40 años, algunos que empezaron a sufrirlo después de pasar varios años sin manejar, muchos aprendieron de joven a manejar y por diferentes motivos comenzaron a manejar 15 años después. Los hombres parecen ser más reacios a admitir su miedo a conducir. Muchas veces los hombres manifiestan sus temores transformando sus miedo en agresividad y, si van asustados al volante, culpan a los demás de sus propios fallos, se pelean con otros conductores. Los accidentes de tráfico, las malas experiencias durante el periodo de aprendizaje al volante o los largos periodos sin conducir pueden causar amaxofobia, un temor extendido que pocas personas reconocen como tal.
Como cualquier fobia, requiere apoyo, paciencia, comprensión; volver a aprender a manejar e, incluso, recurrir a un especialista. Es importante a tener en cuenta:
. Síntomas Físicos: Sudores, temblores, dolor de estómago y taquicardias.
. Síntomas Psicológicos: Ansiedad, ataques de pánico y depresión.
TRATAMIENTO
* En muchos casos se hace necesaria la ayuda profesional para superar esta fobia a manejar, sobre todo cuando el miedo deriva de un accidente de tráfico, lo cual podría relacionarse con otro trastorno de ansiedad como es el :Trastorno de Estrés Post-Traumático.
* La familia muchas veces debe tratar de ser menos critico, mas comprensivo y estar dotado por una mayor cuota de paciencia, ya que muchas veces no logra comprender totalmente este problema.
Aunque muchas personas no lo tomen demasiado en serio, el problema es real. Es por eso que si UD. ve a un conductor que a veces no se anima a pasar a otro auto, a un camión, o que frena excesivamente o que va inclusive a menor velocidad de la mínima permitida para ir en una autopista: por favor no le haga señas de luces, no le “tire el auto encima”, no lo increpe, ya que puede ser una persona que esta padeciendo una enfermedad y que seguramente con una actitud intimidatoria solo aumentara el riesgo de un accidente.
Dr. Gustavo Bustamante
Director General
Fundación Fobia Club

http://www.unamiradadistinta.com.ar/miedo-a-conducir-como-combatir-la-amaxofobia/